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INTRODUCCIÓN: "IMPRESCINDIBLE LEER PRIMERO".

P: Algunos sociólogos de la modernidad han señalado con
acierto que la sociedad moderna occidental -nuestra sociedad-
vive convencida de la superioridad de su sistema
de valores morales, culturales, políticos y sociales. Esta
concepción acrítica de nuestro sistema conlleva que las
injusticias que se cometen a su amparo queden más fácilmente
legitimadas.
Precisamente usted, en su libro, trata de desmontar esas
"ideas precocinadas", esa "selva de mentiras, tópicos y
medias verdades" que hacen que vivamos confortablemente
instalados en nuestra sociedad sin mala conciencia,
sin percatarnos ni, por tanto, cuestionarnos las injusticias
sobre las que se asienta nuestro sistema. En definitiva, usted
propone un ejercicio de profunda autorreflexión...

R: El lector de este libro debe ser capaz de aventurarse
con un machete mental en una selva topical (de
tópicos) y no morir en el intento. Dudar vale la pena,
retorcer las ideas precocinadas en conversaciones de
amiguetes, padres, novios y compañeros de trabajo
vale la pena si uno tiene la curiosidad ( y la flexibilidad
cerebral) de cuestionar las ideas más sagradas que, a
veces, están llenas de mentiras, y acercarse a una verdad
razonable. No será fácil este viaje, aviso.

1. "TODAS LAS GUERRAS SON INJUSTAS" Y "LA PRINCIPAL
AMENAZA DEL MUNDO HOY ES EL TERRORISMO".

P: Cada vez más a menudo nuestros gobiernos aparecen
ante la opinión pública como los más legitimados para
llevar la justicia, la libertad y la defensa de los derechos
humanos a lo largo de todo el mundo. Sin embargo, resulta
paradójico cómo muchos de estos mismos gobiernos atacan
constantemente el sistema legal de libertades en vigencia.
Por citar algunos ejemplos, usted alude a la lucha antiterrorista
encabezada por Estados Unidos y a la Guerra de Irak, y a
situaciones como las de Guantánamo y Abu Ghraib.

R: Vivimos una época (aún hay que ver que pasa finalmente
con Obama) de paradojas; por un lado los
gobiernos (democráticos y dictatoriales) combaten con
fiereza el terrorismo y, por otro lado, estos gobiernos
se parecen cada vez más a los terroristas que dicen
combatir. Muchos gobiernos dicen combatir en nombre
de la libertad pero encarcelan sin juicio a miles
de personas; afirman expandir la democracia por el
mundo pero lo hacen destruyéndola. El terrorismo es
una amenaza real para miles de personas, pero hoy la
amenaza más dura está en aquellos gobiernos que lo
combaten sin principios ni escrúpulos. La democracia
puede perder su significado a fuerza de reivindicarla
con hipocresía.

P: Precisamente por encontrarse tan lejos de nuestro ámbito
moral las víctimas civiles ocasionadas por las contiendas,
es más fácil que se imponga el "discurso utilitarista de la
guerra", verdaderamente terrible...

R: No creo que sea fácil hoy imponer a la opinión pública
la utilidad de una guerra injusta. Lo hemos visto con
las manifestaciones del año 2003 contra la guerra de
Irak o las movilizaciones contra el bombardeo y el bloqueo
en Gaza. Otra cosa es que la guerra, a pesar de las
movilizaciones, se desencadene finalmente pero hoy
más que nunca la gente no está "dispuesta" a comprar
una guerra injusta, y a apoyar a los gobiernos que la
promueven.
Pero también quiero decirle que puede imponerse
también en la opinión pública un apaciguamiento
pacifista a toda costa, y en este sentido el libro
plantea que todas las guerras son crueles pero no
todos los comienzos de una guerra son injustos.
A veces la historia demuestra -la lucha contra el nazismo,
Mandela contra el apartheid en Sudáfrica- que
luchar por la libertad, o por no desaparecer, frente a
dictaduras feroces o potencias ocupantes aniquiladoras
no quedó más remedio que hacerlo con las armas.

Esteban Beltrán, en junio del año 2008 dialoga con los responsables de un centro en Tenerife, que alberga a menores de edad inmigrantes no acompañados que han llegado en patera a las playas canarias. El autor estaba allí para conocer el trato que reciben.


2. "LA TRANSICIÓN ESPAÑOLA MODÉLICA".

P: En el capítulo de su libro "La transición española modélica
" usted plantea una tesis que, como poco, puede levantar
ampollas. Considera que nuestra transición a la democracia
no fue, ni mucho menos, modélica, tal y como tantas veces
se ha proclamado con orgullo. Al contrario, en ella se habría
relegado al olvido a la parte perdedora de la guerra, para la
que no habría habido reconocimiento, reparación ni justicia
ante su sufrimiento.

R: La transición española de dictadura a democracia ha
dejado sepultados en la cuneta a decenas de miles de
personas, por eso no fue modélica. No puedo sentirme
orgulloso de unos años en los que supuestamente el fin
-la democracia- justificaba los medios, es decir el olvido
del dolor de millones de personas. Y además planteo
en el libro que la transición tampoco fue modelo para
otras sociedades que pasaron de dictadura a democracia.
Excepto la URSS, todos los demás países (Argentina,
Liberia, Camboya, Alemania, entre otros) vivieron procesos
imperfectos al pasar de dictadura a democracia
o de conflicto armado a paz, pero en todos ellos hubo
algo de verdad oficial, de justicia legal y de reparación.
Aquí estos derechos sólo fueron reconocidos por el estado
a los que sufrieron abusos por parte de la República
en los años cuarenta. No, la transición española no fue
modélica aquí ni modelo para el resto del mundo.


3. "EN ESPAÑA NO SE TORTURA".

P: En el capítulo "En España no se tortura", expone una
tesis, cuanto menos, inquietante: en nuestro país existen
leyes tales como el "régimen de incomunicación" que favorecen
la práctica de la tortura. ¿Cuál es la salud de los
derechos humanos en España?

R: La tortura en España no interesa a casi nadie y, mientras,
sigue extendiéndose al amparo del desinterés general.
Todos los gobiernos la niegan, especialmente si
se refiere a personas acusadas de terrorismo, y en todo
caso, reconocen, de vez en cuando, algún caso concreto
muy evidente. La opinión pública tampoco aparece
muy interesada en el problema y sólo se conmueve
cuando aparecen imágenes clandestinas de policías
pegando a detenidos.
La tortura existe en España, no es sistemática pero son
mucho más que casos aislados, y algunas leyes ( como el
régimen de incomunicación) y abundantes prácticas de
gobiernos (como los indultos y ascensos a torturadores)
sólo la consolidan. De todas maneras el libro explica que
la presión de la comunidad internacional y algunas ONG
locales están consiguiendo avances en la lucha contra
la tortura, como la instalación de videocámaras bajo
control judicial en los lugares de detención.

4. "LA INMIGRACIÓN ES UN PELIGRO."

P: El modelo que propone para los flujos migratorios es el
de "teoría de la puerta global entornada"...

R: Sí, destierre el tópico, la inmigración no es un peligro
para Europa. Lo que sí ha fracasado históricamente
es la política de puerta cerrada a los inmigrantes. Ha
fracasado en costes humanos (miles de vidas en los
fondos oceánicos del estrecho de Gibraltar), en costes
económicos (la cantidad de recursos invertidos en
policía fronteriza, rayos infrarrojos, barcos, sistemas
de control digital), y en eficacia (los imigrantes son
ya 120 millones de personas en todo el mundo y van
creciendo).
Si se gestionan bien los flujos migratorios, éstos pueden
resolver algunos problemas básicos de nuestra
sociedad, y para ello planteo la necesidad de un pacto
global de inmigración que favorezca la llegada (y la
salida) ordenada de inmigrantes y su reparto. Es decir,
pasar del concepto sagrado de control de la inmigración
al concepto práctico de gestión de la inmigración.
¿No vale la pena probar esta nueva forma de tratar la
inmigración si la anterior ha fracasado?
De todas maneras, con la crisis económica actual, no
soy optimista en la puesta en práctica de esta nueva
forma de tratar la inmigración. Hoy las sociedades son
más defensivas que hace dos años y, lamentablemente,
aumentará el racismo y la xenofobia.

Esteban Beltrán junto a la Secretaria General de Amnistía Internacional en junio del año 2008 en un cementerio de Tenerife donde, en nichos sin nombre y sin lápida, son enterrados muchos inmigrantes que pierden la vida tratando de llegar a España.


5. "LA POBREZA NO PUEDE ELIMINARSE
COMPLETAMENTE."


P: Al contrario del tópico comúnmente establecido, usted
defiende que la pobreza puede ser erradicada. Si no
se hace es porque a ciertos países nos interesa mantener
la desigualdad y, por tanto, el status quo. De este modo,
gobiernos y ciudadanos seríamos responsables de que millones
de personas murieran de hambre y de sed. Más que
caridad y donaciones que aplaquen la mala conciencia, lo
que usted exige es justicia.

R: La pobreza tiene muchos mitos, uno de ellos es que
todos somos responsables de la misma, porque así
nadie es responsable. No, yo no soy igualmente responsable
del "crimen de pobreza" que el gobierno de
Israel cuando derriba miles de viviendas de palestinos
o cuando el dictador de Zimbabue utiliza la escasez
de cereales para dejar hambrienta a la oposición. El
debate sobre la pobreza cambiará, y empezaremos a
vencerla cuando comparezca esposado ante un tribunal
cualquiera de los "Pinochet de la pobreza" que ha
dejado sin vivienda, sin agua o sin educación a millones
de personas. ¿No resulta extraño que a pesar de
las terribles estadísticas sobre la pobreza en el mundo
nunca nadie haya rendido cuentas ante un juez?


6. "LA RESPONSABILIDAD SOCIAL CORPORATIVA, LAS
BUENAS OBRAS DE LAS EMPRESAS."

P: En muchas ocasiones, las empresas que actúan en el
ámbito internacional y que con sus actividades contribuyen
a la violación de los derechos humanos se acogen a la
fórmula del "respeto a la legislación interna de cada país"
para no tener que asumir responsabilidades. Un ejemplo
entre otros de los que cita usted es el de Microsoft, y la
contradicción entre el discurso de Bill Gates al recoger el
premio Príncipe de Asturias y la censura de contenidos en
sus buscadores de China, que justifica aludiendo al respeto
de la "legislación vigente" en ese país.
Como usted bien dice, parece que para las empresas fuera
"opcional y voluntario" aplicar los derechos humanos.


R: Muchas empresas venden humo cuando hablan de
Responsabilidad Social Corporativa. Piense bien en
estas tres palabras... En realidad no significan nada,
pero, al haberse popularizado empresarialmente,
han consolidado entre las empresas una teoría: "no
se me puede obligar a nada, yo voluntariamente ayudo
a la sociedad y respeto las leyes de cada país". Ésta
es una jugada maestra; las empresas parecen ayudar
a los pobres, respetan las leyes de los gobiernos y al
mismo tiempo hacen negocios sin coste político. Hay
que acabar con esto y tener leyes que, como a los gobiernos,
obliguen a las empresas a respetar y promocionar
los derechos humanos en los lugares que operan.
Y si los violan, los jefes y empleados deberían ser
llevados ante un tribunal. No se pueden violar leyes
laborales impunemente, no se puede colaborar en la
censura con gobiernos dictatoriales o dejar sin peces
ni agua a miles de personas en el delta del Níger sin
que tenga un coste legal, económico y de imagen
para las empresas.


7. "¡QUÉ BUENAS SON LAS ORGANIZACIONES
GUBERNAMENTALES!"

P: ¿Son realmente No Gubernamentales las ONG?

R: No, el libro plantea que en España ( a diferencia por
ejemplo de Gran Bretaña) muchas organizaciones no
gubernamentales dependen económicamente cada
vez más del gobierno central o del gobierno autonómico
o del gobierno local, y no luchan realmente por
cambiar el mundo. Por eso las llamo Organizaciones
Profundamentamente Gubernamentales. Y son gubernamentales
porque es el estado quien pide que le
presenten proyectos, es el gobierno quien las orienta
sobre los proyectos realmente importantes para el
estado, las financia adecuadamente y, finalmente,
evalúa si han llevado a cabo la actividad.
Esta dependencia enfermiza de las ONG con respecto
al estado hace que éste delegue en ellas la atención
de los "últimos de la fila" de la sociedad (presos, ancianos,
mendigos, parados, menores no acompañados,
exhumaciones de fosas comunes del franquismo
y la Guerra Civil) como si no fuera su responsabilidad
esta parte de la sociedad, y domestica el discurso crítico
de las ONG bajo amenaza, real o imaginaria, del
recorte de la subvención.
Naturalmente siempre hay excepciones, es decir ONG
independientes, pero son cada vez menos. Lo importante
aquí es no engañarse: muchas ONG son parte del
estado (o de la Iglesia) y muchas hacen una labor muy
meritoria, pero son una parte no declarada del estado
(o de la Iglesia) y no van a cambiar el mundo, ni siquiera
un poquito, aunque quisieran, que no quieren.
Si realmente una ONG quiere contribuir a resolver
los problemas que devastan a los habitantes de este
mundo, tiene que ser capaz de investigar las cloacas
y las políticas de estados y empresas sin tener que
preguntarse todos los días si está mordiendo la mano
que mece su cuna.


Esteban Beltrán en un acto de calle firmando un panel en el que se reclama al gobierno chino la liberación de presos de conciencia y libertad de expresión con ocasión de los Juegos Olímpicos de Pekín en Agosto de 2008